Cómo usar correctamente una cama de bronceado
El uso de las camas solares se ha convertido en un ritual común para muchos, especialmente en primavera. A pesar de su popularidad, algunas personas siguen usando estas cámaras de luz sin tener en cuenta las recomendaciones de los especialistas.
En Ideas en 5 minutos te contaremos qué puntos es importante tener en cuenta a la hora de usar una cama de bronceado, y quiénes deberían abstenerse de tal procedimiento.
❗ Este artículo es informativo y no puede reemplazar las recomendaciones de un médico.
❗ Para protegerse, es mejor consultar con un especialista antes de usar una cama solar. Él podrá evaluar la posibilidad de que la uses y te informará sobre el tiempo que puedes pasar bajo el “sol artificial”.
Qué es una cama de bronceado y cómo funciona
La cama solar es una cámara de luz utilizada para el bronceado en interiores. Es una pequeña cabina cerrada con una iluminación brillante en la que una persona puede estar de pie o acostada durante un tiempo determinado.
El aparato genera radiación, casi idéntica a la del sol. Bajo su influencia, la piel comienza a sintetizar melanocitos activamente y adquiere un bronceado de un color específico.
Cómo una cama de bronceado afecta a la piel
Las células de la epidermis (capa superior de la piel) son capaces de producir el pigmento melanina, responsable del color natural del cuerpo. Cuando la piel se expone a la radiación UV, comienza a producir más melanina y se oscurece, lo que se convierte en un bronceado.
❗ Expertos afirman que no existe un bronceado seguro. Este es una señal de daño en la piel y su forma de protegerse de la radiación ultravioleta.
La radiación ultravioleta de una cama solar es 6 veces más fuerte que la del sol en verano, por lo que se debe usar con mucho cuidado. Vale la pena recordar que la exposición fuerte o prolongada a la radiación ultravioleta puede causar daños en la piel: quemaduras solares, irritación, enrojecimiento e hinchazón, así como afectar negativamente a la salud ocular. Además, algunos estudios han mostrado que las camas de bronceado aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel.
Cómo usar la cama de bronceado
- Quitar todo el maquillaje antes de usar la cama de bronceado para evitar la pigmentación accidental y el bronceado desigual. No usar perfume, ya que esto puede irritar la piel.
- Sacarse todas las joyas. Si usas lentes de contacto, también es una buena idea quitártelos antes de entrar a la cámara.
- No usar el protector solar regular para obtener un bronceado uniforme. Utilizar cosméticos diseñados específicamente para camas solares.
- Para proteger el cabello, es mejor ponerse un gorro especial en la cabeza antes de ingresar a la cámara. Y para evitar resecar la piel de los labios, se puede usar un bálsamo con filtro UV.
- Además, hay que asegurarse de usar gafas especiales. Los rayos ultravioletas pueden penetrar fácilmente a través de los párpados cerrados y afectar la salud de la retina.
- Se puede acceder a la cama solar en ropa interior, traje de baño o sin nada. Sin embargo, si eliges la última opción, asegúrate de usar accesorios adhesivos especiales: stikini.
- Después de la cama solar, se recomienda ducharse, aplicar una crema hidratante en el cuerpo y reposar.
- A las personas con la piel sensible no se les recomienda quedarse en la cama solar más de 3 minutos. Para gente con la piel ligeramente oscura, cabello oscuro, ojos grises o café claro, la duración de la sesión se puede aumentar a 10 minutos, y las personas muy oscuras pueden pasar en la cama de bronceado aún más tiempo, hasta 20 minutos.
- Para determinar la frecuencia del uso de la cama solar hay que guiarse por la reacción de la piel al “sol artificial”. Será suficiente que algunos pasen unos minutos en la cama bronceadora una vez a la semana, mientras que otros necesitarán aumentar el intervalo hasta 2 veces al mes. Sin embargo, en cualquier caso, no se debe visitar la cámara más de una vez al día. Si se producen quemaduras en la piel, se debe esperar su recuperación completa y solo luego reanudar los procedimientos.
Quién debe abstenerse de usar una cama de bronceado
En algunos casos, los expertos recomiendan abstenerse del uso de camas solares, tanto por completo como temporalmente. Se debe evitar broncearse en los siguientes casos:
- Personas con piel clara propensa a las pecas y piel que se quema fácilmente con el sol
- Niños, ya que su piel tiene niveles más bajos de melanina
- Mujeres durante el período: la cama solar puede aumentar la secreción y exacerbar el dolor
- Si se toman ciertos medicamentos (por ejemplo, antibióticos, diuréticos, medicamentos hormonales y otros)
- Mujeres embarazadas y lactantes
- Personas con muchos lunares y erupciones en el cuerpo
- Personas con ciertas enfermedades (por ejemplo, con problemas del hígado, riñones y la glándula tiroides)
- Después de la depilación y el peeling, cuando la piel ya ha estado expuesta a influencias ajenas
- Justo después de tomar una ducha o visitar la sauna (baño de vapor)