Ahorro de electricidad. Se considera que el objetivo principal de adelantar las manecillas del reloj es un uso más eficiente de la luz del día. El horario de verano hace que las tardes sean más luminosas y la gente utiliza menos electricidad en sus hogares.
Aumento de la actividad. Las tardes luminosas de verano animan a salir de casa. Muchas personas empiezan a llevar un estilo de vida más activo, pasando tiempo en parques y zonas al aire libre.
Beneficios para la salud. Una mayor cantidad de las horas de luz del día aporta a nuestro cuerpo más vitamina D, tan necesaria para una vida sana y activa.

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