La escala Fahrenheit fue la primera escala de temperatura en el mundo. Para medir la temperatura con ella, se utilizan los grados Fahrenheit (°F). El cero en esta escala está representado por la temperatura más baja que se consiguió registrar mientras se estudiaba una mezcla de hielo, agua y cloruro de amonio. Debido a esto, la temperatura de congelación del agua es +32 °F y la temperatura de ebullición es de +212 °F.

Más tarde, apareció la escala Celsius, que mide la temperatura en grados Celsius (°C) desde el punto de congelación hasta el punto de ebullición del agua (tiempo después, se adoptó el cero como punto de congelación del agua). Actualmente, el cero en la escala de Celsius toma en cuenta el valor de la temperatura y presión, en donde el agua puede existir al mismo tiempo y en equilibrio en 3 estados: sólido, líquido y gaseoso.

Como resultado, el cero en la escala de Fahrenheit corresponde a −17 grados en la escala de Celsius: 0 °F = −17 °C; y el cero en la escala de Celsius corresponde a 32 grados en la escala de Fahrenheit: 0 °C = 32 °F.

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