Edad: de 11 a 14 años.

A los 11 años, un gato puede llamarse casi anciano. En esta etapa la mascota necesita más actividad mental. Hay que hacer que su cerebro se entrene, por ejemplo, con la ayuda de juguetes especiales, como rompecabezas con comida.

A esta edad puede cambiar el carácter del animal. Algunos gatos se vuelven irritables. Esto a menudo se debe a cambios en el cerebro o a que el animal experimenta dolor y molestias debido a problemas en las articulaciones. La enfermedad articular suele ser un problema oculto que debe identificarse y tratarse. En la vejez, la funcionalidad de algunos órganos del gato puede disminuir. Hay que observar al animal, registrar cualquier cambio y hablarlo con el veterinario.

Es buena idea realizar un nuevo análisis de sangre. Esto ayudará a identificar problemas de salud en las primeras etapas. El especialista también puede dar nuevas recomendaciones respecto a la nutrición del animal mayor.

Un gato de 12 años se puede comparar con una persona de 64 años.

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