Cómo rastrear huellas de animales
Saber rastrear las huellas de animales es una habilidad útil si quieres aprender más sobre la naturaleza a tu alrededor y otras criaturas que viven allí. En realidad, es una actividad muy antigua que servía a los humanos para cazar, aprender más sobre el comportamiento animal y estar al tanto de los posibles peligros en su entorno.
En Ideas en 5 minutos, elaboramos una lista de pasos que puedes usar para rastrear animales.
1. Prepárate para el rastreo
Prepara algunas cosas antes de salir a rastrear a los animales.
1. Usa un palo. Te puede ayudar a concentrarte en el camino, también puedes hacer una marca al lado de la huella de animal para saber que fue el último rastro que miraste (si estás dando vueltas), o puedes usar un palo para examinar el excremento.
2. Lleva pañuelos biodegradables. Puedes usar un pañuelo para marcar el lugar donde ya miraste las huellas.
3. Un cuaderno y un lápiz. Te servirán para anotar tus hallazgos.
4. Una guía de rastreo o de campo. Puedes comparar la información que tienes con los datos de la guía para saber qué animal estás rastreando.
5. Una regla. La necesitarás para medir la pisada del animal.
6, 7, 8. Palos de helado, cuerda y cinta adhesiva. Esto te ayudará a descubrir adónde va el animal.
9, 10. Pinzas y guantes de látex (opcional). Puedes usarlos mientras examinas el excremento.
Nota: Es ideal buscar huellas de animales temprano por la mañana o antes de anochecer. Cuando el sol brilla fuerte, es más difícil notar las huellas, por lo que es mejor buscarlas cuando la luz es más tenue. Además, los animales suelen descansar durante el día y son más activos al amanecer o atardecer.
2. Encuentra pruebas de un animal
Mientras los animales se mueven, dejan pruebas de ello. Busca lo siguiente.
- Huellas. Examinando las huellas, puedes saber adónde iba el animal, por qué estaba allí, si estaba cazando o simplemente de paso, cuándo estuvo allí, etc.
- Excrementos (heces). Estos pueden decirte qué animal los ha dejado allí y cuándo. Asegúrate de llevar puestos guantes higiénicos y palos o pinzas mientras examinas las heces. Recuerda que los animales dejan excrementos en el área donde se sienten seguros y, a menudo, cerca del nido o madriguera donde viven.
- Alteración del suelo. Encontrar tramos u otras marcas (como comprobar si el suelo está caliente) también puede ayudarte a reconstruir el movimiento y las acciones del animal.
- Signos de frotar, roer o masticar. Puedes aprender mucho sobre el comportamiento del animal si buscas estos signos. Por ejemplo, los ciervos machos suelen frotar sus astas contra los árboles durante el período de apareamiento.
- Pelo o plumas arrancados. Esto puede indicar que los animales estaban peleando y que, probablemente, haya una evidencia de ello cerca.
- Rutas de viaje incluyen senderos, carreras y rutas de escape. Los senderos se utilizan con frecuencia por muchas especies de animales, mientras que las carreras son un poco más específicas porque suelen utilizarse por un animal en particular. Puedes reconocer las rutas de escape porque, por lo general, se usan una vez y puedes ver los choques en el suelo.
3. Examina las huellas del animal
Cuando encuentras una huella, observa cuántos dedos hay en cada pie, mira las marcas de las garras, la forma y el tamaño de la impresión. El rastro se hace cuando el cojinete se desliza en el suelo, produce algo de presión y se saca. Ninguna pisada se forma por la presión directamente hacia abajo: siempre se hace en un ángulo, ya sea cuando el pie esté entrando o saliendo.
El rastreo de las huellas es importante porque puede darte respuestas sobre lo que este animal en particular estaba haciendo en el sitio, si estaba buscando comida o simplemente pasando por allí, cuándo estuvo en el lugar y hacia dónde se dirige. Con toda esta información, puedes reconstruir toda la cadena de eventos, aprender más sobre el animal y desarrollar una estrategia de seguimiento.
Mucha gente no lee la verdadera huella de la impresión. Cuando el pie presiona el suelo, forma una parte plana en él. La longitud y el ancho de la parte plana representan la verdadera huella. Es importante saber cuál es la verdadera huella y cómo medirla porque así podrás distinguir a qué animal pertenece la pisada. Si solo estás analizando la huella general (los cortes horizontales), no podrás determinar qué animal la dejó porque algunas pisadas se ven muy similares.
Cómo medir la pista:
- Examina todas las cuatro huellas. Mide la longitud y el ancho de las cuatro huellas que dejó el animal.
- Mide la longitud de dedo a dedo. Los animales pisan primero con los dedos, por eso la longitud entre huellas se mide de dedo a dedo.
- Calcula la zancada. Encuentra la distancia entre el cojinete de un lado y el siguiente cojinete del otro lado.
- Mide la separación. Examina la distancia entre el borde interior de cada huella, de la izquierda a la derecha.
4. Comprende el patrón de la pista
Hay cuatro patrones principales de movimiento que te ayudarán a identificar qué animal dejó las huellas:
- Saltos. Las patas delanteras del animal se mueven juntas, seguidas por las dos patas traseras (por ejemplo, los animales de la familia de las comadrejas, excepto mofetas y tejones).
- Caminatas diagonales. Los lados opuestos de estos animales se mueven al mismo tiempo (por ejemplo, ciervos, alces, zorros, lobos, coyotes, linces y perros).
- Caminata de patos. Los animales parecen andar como patos con sus cuerpos anchos moviéndose de un lado a otro. Las patas de un lado del animal tienden a moverse al mismo tiempo (por ejemplo, mapaches, mofetas, castores y zarigüeyas).
- Galope. Las patas delanteras pisan primero y las patas traseras rodean el exterior y se mueven donde aterrizaron las patas delanteras (este tipo incluye animales pequeños, como ratones, ardillas y animales más grandes, como conejos y liebres).
5. Descubre hacia dónde va el animal
Puedes determinar la línea del viaje del animal con palos de helado. También lo puedes hacer a ojo, pero a veces las pistas no son lo suficientemente claras, así que te recomendamos recurrir al siguiente truco:
- Coloca palos de helado en los cojinetes de las huellas del animal.
- Pega una cuerda entre los palos.
- Comprueba si una pata delantera está detrás de las otras cuatro huellas.
- El lado dominante da un paso más corto y punzante, mientras que el no dominante da un paso más largo. La pata que se retrasa es la dominante, lo que puede indicarte que el animal suele dar vueltas en esa dirección.
Nota: Ahora que examinaste las huellas y sabes en qué dirección se mueve el animal, puedes buscar otras pruebas, como las que fueron mencionadas en el punto dos. Cuando encuentres más pruebas, podrás determinar si te estás acercando al animal o no.