Qué es el síndrome de piernas inquietas y por qué les impide dormir a las personas
Si por la tarde y noche sientes algo desagradable en tus piernas y te dan muchas ganas de moverlas constantemente, entonces te recomendamos echarle un vistazo a este artículo. Si no tienes nada de lo mencionado, entonces eres una persona afortunada. Pero, posiblemente, alguno de tus seres queridos se haya tenido que enfrentar a este problema.
Junto con Ideas en 5 minutos, averiguarás qué es el síndrome de las piernas inquietas y por qué no deja que las personas puedan dormir tranquilamente.
❗ Este artículo es de carácter informativo y no reemplaza las recomendaciones de un especialista. En caso de tener algún problema de salud, se sugiere acudir al médico.
Qué es el síndrome de las piernas inquietas
El síndrome de piernas inquietas (SPI) o enfermedad de Willis-Ekbom, es una afección que causa una necesidad imperiosa de mover las piernas. Por lo general, esto se debe a sensaciones desagradables en las extremidades que desaparecen cuando se ponen las piernas en movimiento.
Normalmente, una persona comienza a sentir los síntomas de SPI por la tarde o por la noche, sin importar si está sentada o acostada. Por lo tanto, esto es capaz de interrumpir el sueño. Las sensaciones desagradables casi siempre desaparecen temprano por la mañana, por lo que a las personas con SPI frecuentemente les gusta dormir a esa hora.
El síndrome de piernas inquietas puede comenzar a cualquier edad. Con el paso de los años, se manifiesta con más intensidad. SPI es una condición de por vida, pero algunas personas entran en remisión y pueden dejar de tener síntomas por días o incluso años.
Síntomas del SPI
Los especialistas destacan los siguientes síntomas del síndrome de piernas inquietas:
- imperiosa necesidad de mover las piernas, que a menudo se acompaña con sensaciones desagradables o inusuales;
- al descansar, aumenta la necesidad de mover las piernas;
- al moverse, esta necesidad desaparece de manera parcial o total;
- necesidad de mover las piernas comienza o se intensifica por la noche.
Las personas con síndrome de piernas inquietas experimentan las siguientes sensaciones en sus piernas:
- comezón;
- sensación de ardor;
- piel de gallina;
- espasmos;
- dolor;
- pulsación;
- hormigueo.
Las sensaciones desagradables suelen ocurrir en ambos lados. Pero también pueden aparecer en una sola pierna. Podría pasar que comiences a sentir los síntomas de SPI en un lado y luego se pase hacia el otro.
Los síntomas del SPI pueden variar de leves a graves. También pueden aparecer y desaparecer y su intensidad puede cambiar.
Cuáles son las causas del síndrome de piernas inquietas
No existe una respuesta precisa a la pregunta de por qué surge el síndrome de piernas inquietas en una persona. Sin embargo, los expertos han identificado posibles causas para el desarrollo de esta condición.
- Factor hereditario. Casi la mitad de las personas con SPI tienen un familiar que también padece esta condición.
- Enfermedades crónicas. El SPI puede acompañarse con algunas de las siguientes enfermedades:
— deficiencia de hierro;
— enfermedad de Parkinson;
— insuficiencia renal o enfermedad renal;
— diabetes;
— neuropatía periférica. - Tratamiento con medicamentos. Algunos medicamentos pueden intensificar los síntomas del SPI:
— medicamentos para las náuseas;
— neurolépticos;
— medicamentos para el resfriado y la alergia que contengan antihistamínicos. - Embarazo. A algunas mujeres les aparece el SPI durante el embarazo, especialmente en el último trimestre. Normalmente, los síntomas desaparecen en el transcurso de un mes después del parto.
- Dificultades con el sueño. La falta de sueño o las alteraciones del sueño, tales como la apnea del sueño, pueden causar o empeorar los síntomas del síndrome de piernas inquietas.
- Consumir algunos productos, como la cafeína, pueden causar la aparición del SPI.
Cómo aliviar los síntomas del SPI por cuenta propia
El síndrome de piernas inquietas es una condición incurable, pero se puede tener bajo control. En caso de ser provocado por alguna enfermedad, entonces debe desaparecer tan pronto como desaparezca la causa. Por ejemplo, eliminar la deficiencia de hierro.
Para que el SPI no impida llevar una vida normal, se deben aliviar sus síntomas. Los expertos dan las siguientes recomendaciones:
- hacer ejercicio de forma regular;
- mantener un horario de sueño;
- dejar de consumir cafeína;
- hacerse un masaje de pies;
- tomar baños calientes;
- colocar en los pies bolsas de agua caliente o bolsas de hielo;
- dormir en una almohada vibratoria;
- tomar medicamento. A algunas personas les ayudan los medicamentos. Pero un tipo de medicamento puede aliviar los síntomas en una persona, mientras que en otra, por el contrario, empeorarlos. O un medicamento que había ayudado por un tiempo simplemente puede dejar de funcionar. En cualquier caso, solo un médico puede recetar un medicamento.
Algunas personas que tienen SPI no lo consideran una condición grave que requiera la consulta de un especialista. Sin embargo, si el síndrome te impide dormir bien y afecta la calidad de vida en general, entonces se sugiere acudir a un médico.