Cómo guardar los huevos correctamente

La calidad de los huevos depende de cómo los guardes. En las condiciones correctas, pueden permanecer frescos entre 3 y 5 semanas. Si los congelas, pueden durar más.

Ideas en 5 minutos te explica cómo guardar correctamente los huevos y, en caso de ser necesario, cómo alargar la vida útil del producto.

Cómo guardar huevos crudos después de la compra

No es una buena idea guardar los huevos en la puerta del refrigerador. Cada vez que abres y cierras el electrodoméstico, sufren cambios de temperatura. Es preferible guardar los huevos en su envase original en la parte principal del refrigerador, donde hay una temperatura estable. Puede ser la repisa superior o la del medio. Allí los huevos se pueden conservar entre 3 y 5 semanas, pero no más allá de la fecha de caducidad indicada en el envase.

Cómo guardar las yemas y las claras crudas

Las claras y las yemas crudas se pueden guardar en recipientes alimentarios bien tapados hasta por 4 días. Para que las yemas no se sequen, vierte poca cantidad de agua fría y antes de usarlas, escúrrelas.

Cómo guardar huevos cocidos

Al igual que otros productos preparados, guarda los huevos duros en la repisa superior del refrigerador. Colócalos en un recipiente hermético, tápalos y consúmelos en el término de una semana.

Cómo guardar platillos hechos con huevo

Al igual que los huevos duros, se guardan en un recipiente hermético con tapa. Sin embargo, el tiempo de caducidad será más corto, ya que se recomienda consumir el platillo preparado dentro de los 3 o 4 días.

Congelación de huevos

• La congelación puede ayudar a prolongar la vida útil de los huevos crudos. Coloca un recipiente de huevos sin cáscara o con claras y yemas por separado dentro del congelador. No se recomienda congelar huevos con cáscara. Esto afectará la calidad y la estructura del producto.

• Los huevos congelados se pueden guardar en el congelador hasta por un año. Sin embargo, asegúrate de que el congelador cuente con óptimas condiciones. Los huevos congelados se guardan a una temperatura no superior a −18 °C.

• Las yemas requieren un poco de procesamiento antes de congelarse. Si las congelas como vienen, con el paso del tiempo se espesarán tanto que no podrás usarlas para cocinar. Para ralentizar este proceso, por cada 4 yemas agrega 1/8 de cucharadita de sal al recipiente o 1 cucharadita y media de azúcar. Pon condimento uniformemente sobre las yemas y tápalas. Escribe en la parte superior lo que hayas agregado: sal (en este caso, los huevos se pueden usar para preparar platillos) o azúcar (para hornear y hacer postres).

• Para congelar claras, puedes usar bandejas de cubitos de hielo en lugar de un tupper. Vierte la clara en las células y úsala en porciones a la hora de cocinar.