Cómo lavar las bayas correctamente
Parece que no hay nada más fácil que lavar las bayas, pero algunas de ellas tienen pieles bastante delicadas y requieren una manipulación cuidadosa.
Ideas en 5 minutos explica cómo lavar correctamente las bayas y comparte los detalles sobre el lavado de las más populares.
Dónde guardar las bayas después de la compra
Si tienes pensado comer o utilizar las bayas en las 24 horas siguientes a la compra, simplemente déjalas tapadas sobre la mesa. De lo contrario, guarda las bayas en el refrigerador para evitar que se estropeen rápidamente. Los arándanos y las fresas pueden conservarse en estas condiciones durante 5-7 días, mientras que las moras y las frambuesas pueden conservarse durante 3-5 días.
Las bayas pueden dejarse en sus envases de plástico originales. Son adecuados para almacenar en el refrigerador. Sin embargo, si guardas las bayas en tu propio recipiente, colócalas en una sola capa y deja un pequeño hueco en la tapa para que circule el aire.
Mantén las bayas en el refrigerador hasta que estés listo para comerlas o usarlas para cocinar. Toma exactamente la cantidad que necesites. Las bayas absorben el agua con facilidad, y si las lavas y las guardas en el refrigerador, pueden enmohecerse o ablandarse.
Cómo lavar las bayas correctamente
La secuencia general de acciones es bastante sencilla:
- Colocar las bayas en un colador.
- Enjuagarlas suavemente bajo el chorro de agua fría.
- Pasar las bayas del colador a una superficie plana.
- Secarlas con una toalla de papel o un paño de cocina limpio.
Sin embargo, este método de enjuague es más adecuado para las bayas firmes y duras cuyas pieles pueden soportar la presión del agua corriente. Para las bayas delicadas y de piel blanda, es más adecuado el método de remojo, que se describe a continuación.
Cómo lavar las fresas
Las fresas son bayas resistentes y firmes cuya piel puede soportar la presión del agua corriente. Por lo tanto, puedes enjuagarlas como se ha descrito anteriormente.
Si te preocupa que el agua corriente no elimine todas las bacterias y pesticidas de las fresas, prueba a utilizar un baño de agua salada. Añade una cucharadita de sal por cada taza de agua tibia y deja que se disuelva. A continuación, deja que el agua se enfríe, sumerge las bayas en ella durante unos minutos y luego enjuágalas bajo el grifo.
Cómo lavar las frambuesas
La pulpa de las frambuesas es muy delicada y absorbe fácilmente el líquido, por lo que es aconsejable lavar estas bayas con la mayor suavidad posible:
- Llena un recipiente grande con agua fría.
- Coloca las bayas en un colador y sumérgelas en el recipiente con agua.
- Traslada las bayas a una superficie plana.
- Sécalas suavemente con una toalla de papel o un paño de cocina limpio.
Cómo lavar las moras
Aunque parezca que las moras tienen una piel más gruesa que las frambuesas, siguen siendo bayas increíblemente delicadas y deben lavarse con mucho cuidado.
Puedes enjuagar las moras suavemente bajo un grifo de baja presión o colocarlas en un recipiente con agua fría y enjuagarlas suavemente con las manos. Otra opción es poner las moras en remojo en agua con sal en la proporción de una cucharadita de sal por cada taza de agua tibia. Esto ayudará a eliminar los pequeños gusanos que puedan estar escondidos dentro de las bayas.
Cómo lavar los arándanos
Con los arándanos, procede según las circunstancias. Si la piel de las bayas está dura y firme, simplemente colócalas en un colador y enjuágalas bajo el grifo. Si la piel está blanda y tierna, lávalas de la misma manera que las frambuesas.