10 Errores comunes que comprometen tu seguridad digital y cómo evitarlos
Usar aplicaciones y servicios en línea nos puede ayudar en diversos aspectos de nuestra vida. Sin embargo, existen ciertos peligros de los que podríamos ser víctima, como el robo de identidad o fraudes financieros, si no tomamos las debidas precauciones.
Ideas en 5 minutos ha recopilado los 10 errores más comunes que ponen en riesgo tu seguridad digital y qué hacer para remediarlos.
1. Navegar en sitios inseguros o ingresar a enlaces sospechosos
Al navegar por Internet, es posible que te encuentres con una serie de enlaces o sitios web extraños. Hacer esto puede causar que tu dispositivo contraiga malware o software malicioso. Estos son capaces de captar tu información personal y enviarla a terceros, quienes posteriormente la pueden utilizar para cometer fraudes o incluso robar tu identidad.
Para evitar esto, asegúrate de siempre navegar en sitios confiables y seguros considerando los siguientes puntos:
- Verifica la legitimidad de un sitio web revisando la información de contacto, o algún signo de presencia real. Si es necesario, contáctate al número de teléfono o dirección de correo que aparezca.
- Los enlaces maliciosos muchas veces se disfrazan de enlaces oficiales utilizando un hipervínculo. Si tienes dudas, coloca el cursor por encima de este sin hacer clic y fíjate si la URL que aparece en la barra es la que corresponde al enlace. También puedes hacer clic derecho sobre el vínculo y dirigirte a Propiedades. Aquí se mostrará el verdadero sitio al que este te llevará.
2. Acceder a enlaces con ofertas
En el ciberespacio, también puedes encontrarte con sitios de tiendas fraudulentas que normalmente muestran productos a precios que difieren mucho de lo normal. Esto con el fin de atraer a compradores que ingresen los datos de sus tarjetas de crédito para realizar una transacción y así estafarlos o recopilar información personal.
Si has recibido un enlace dirigiéndote a una página de comercio electrónico, ya sea por WhatsApp o correo electrónico, verifica el sitio oficial en Google y revisa si realmente la oferta aparece ahí. También puedes buscar comentarios o alertas de otras personas en redes sociales, ya que es probable que alguien haya reportado dicho sitio como parte de un fraude.
3. Conectarse a redes wifi abiertas
A pesar de que una red wifi abierta o pública te permite seguir trabajando o conectarte desde cualquier lugar mientras estás lejos de casa, puede ser una práctica muy insegura. Cuando enlazas tu computadora a este tipo de redes, puede ser muy fácil para un atacante interceptar tu información confidencial e incluso acceder a tu dispositivo.
Para mantener tus datos y equipo seguros, se recomienda:
- Activar el firewall y antivirus en tu dispositivo
- Verificar en tu navegador las siglas https, esto significa que la conexión es más segura al estar activa la encriptación SSL (Secure Socket Layer).
- Activar una VPN. Algunos expertos recomiendan usar una Red Privada Virtual o VPN (Virtual Private Network) para mantener tu información encriptada mientras estás conectado a una red pública.
- No utilizar estas redes para realizar tareas que comprometan tu información personal, a menos que estés navegando de manera segura (usando un sitio que contenga https o una VPN activa en tu computadora).
4. Conceder permisos a las aplicaciones sin ponerlos en duda
Muchas aplicaciones requieren de ciertos permisos para funcionar de manera correcta y, normalmente, cuando se debe conceder autorización para que estas accedan a ciertas funciones del dispositivo, se pulsa directamente el botón Permitir sin pensarlo dos veces. Al hacer esto, puedes estar otorgando acceso a terceros a tu información personal, o a tu cámara y micrófono.
Por esto, revisa cuidadosamente los permisos que le concederás a la aplicación y si estos realmente tienen sentido con sus funcionalidades. Por ejemplo, es muy poco probable que una aplicación de linterna necesite acceso a tu ubicación o micrófono.
Adicionalmente, se recomienda instalar aplicaciones que provengan de sitios oficiales, como Google Play o App Store, y no de terceros.
5. Utilizar contraseñas poco seguras
Las contraseñas son una forma efectiva y segura de proteger la información personal si se utilizan de manera correcta. Sin embargo, existen algunas prácticas que pueden vulnerar estas características, como usar claves demasiado predecibles.
Las contraseñas menos recomendadas son aquellas que contienen la palabra “contraseña”, nombres y apellidos, fechas de cumpleaños y secuencias numéricas o de teclado (por ejemplo 1234, qwerty, etc.).
Crea una contraseña segura usando combinaciones de más de 8 caracteres, mezclando mayúsculas, minúsculas y símbolos, o utilizando combinaciones de palabras aleatorias, como “casapeztren”. Si bien este tipo de contraseñas pueden ser difíciles de recordar, son la manera más segura de mantener tu información a salvo y así evitar ser víctima del cibercrimen.
6. Usar software desactualizado
Los programas no actualizados pueden ser muy fáciles de quebrantar, ya que no le han sido integradas ciertas mejoras creadas por los mismos desarrolladores al detectar vulnerabilidades o problemas en general. Al ignorar las actualizaciones de un software o deshabilitar sus funciones de seguridad para simplificar la navegación, puedes poner en riesgo la seguridad del sistema y, a la vez, comprometer tu información personal.
Por esto, se recomienda mantener tus programas actualizados y nunca descargar ni instalar programas que provengan de sitios que no sean los oficiales.
7. Conectar dispositivos de terceros a tu computadora
Aunque siempre es recomendable respaldar los archivos que guardas en tu computadora, debes tener mucha precaución al insertar unidades USB que no te pertenezcan. Los dispositivos externos pueden contener malware que podría llegar a infectar todo el sistema muy fácilmente.
Debido a esto, es muy importante que tengas cuidado o que simplemente no conectes unidades externas de terceros en tu computadora si tienes la opción de no hacerlo. Asegúrate de escanear regularmente tus dispositivos para detectar malware o virus y así no infectar otros ordenadores.
Una alternativa para compartir documentos con otras personas sin usar dispositivos externos es hacerlo a través de programas de transferencia de archivos confiables o servicios que utilizan la nube, como Dropbox o Google Drive.
8. Abrir correos electrónicos de desconocidos
El phishing es un conjunto de técnicas informáticas que consiste principalmente en enviar correos electrónicos fraudulentos. Estos correos parecen provenir de una fuente confiable y su principal objetivo es robar información personal, como números de tarjetas de crédito o instalar malware en el dispositivo de un usuario.
Aunque este tipo de correos normalmente llegan a la bandeja de correo no deseado, algunos han logrado burlar este filtro y son potencialmente peligrosos, ya que pueden lucir muy parecidos a los de una organización o compañía oficial.
Para evitar este tipo de vulneración a tu seguridad digital:
- No abras correos electrónicos que parezcan sospechosos. Si tienes dudas, verifica el emisor y revisa que la dirección sea legítima. No respondas el mensaje si la dirección te causa dudas.
- Reconoce las características de un correo de phishing: faltas de ortografía, errores en la redacción, dirección de correo del emisor con combinaciones de letras y números en lugar de un nombre y palabras, dominios ocultos y enlaces acortados.
- Reporta como correo no deseado o elimina correos maliciosos de tu bandeja de entrada para evitar abrirlos por accidente.
9. Repetir contraseñas en varias cuentas
Reutilizar la misma contraseña para distintas cuentas es una práctica común entre los usuarios, ya que, a veces, puede ser difícil recordar diferentes claves para variados servicios.
Sin embargo, los expertos recomiendan variar tus contraseñas de una cuenta a otra para que, en el caso de que los datos de una página se vean vulnerados, estos no les permitan a terceros ingresar a tu usuario en otro sitio donde estés registrado.
Para facilitar el manejo de tus claves, utiliza un gestor de contraseñas, como LastPass o Dashlane. Estos programas ofrecen un sistema donde puedes crear una “clave maestra” y acceder de forma segura y rápida a todas las contraseñas que quieras registrar.
10. Ignorar alertas de conexiones no seguras
Los navegadores, como Google Chrome, son capaces de alertar si una conexión no es segura mediante iconos a un costado de la dirección web o mensajes en la misma ventana. De esta manera puedes saber si estás en un sitio web seguro o peligroso.
Ignorar este tipo de alertas te puede llevar fácilmente a exponer tus datos a terceros, ya que estas se generan a partir del estado del certificado de seguridad de una página determinada, y de la confiabilidad que el navegador tiene sobre él.
Un certificado de seguridad tiene la función de proporcionar conexiones seguras entre navegadores y sitios web, permitiendo la transmisión de datos privados sin que estos sean vulnerados y utilizados para fraudes o estafas. Para saber si un sitio web cuenta con este tipo de sistema, verifica que aparezca un candado al costado de la URL en la barra de direcciones del navegador y una “s” al final de http (https).