Cómo ayudar a tu bebé a expulsar gases

Los bebés pueden tragar aire y, en consecuencia, tener gases, cuyas causas son diferentes: desde la alimentación o el uso del chupón hasta el haber llorado. Cuando hay gases atrapados en su barriguita, los pequeños pueden sentirse irritados, incómodos, hinchados y tener el vientre duro. Por suerte, existen ciertas técnicas que puedes aplicar para tratar de aliviar estos síntomas.

En Ideas en 5 minutos te mostraremos diferentes maneras de ayudar a tu bebé a expulsar gases acumulados y hacer que se sienta mucho mejor.

❗ Importante: Este artículo ha sido creado con fines meramente informativos y no reemplaza el consejo profesional. Siempre consulta con tu pediatra antes de probar cualquiera de las siguientes técnicas en tu bebé. Puede haber detalles importantes sobre la seguridad y la eficacia, así como otras soluciones para ayudar a tu pequeño.

I. Usa el movimiento de la bicicleta

Tumba a tu bebé bocarriba y agarra sus piernas. Después, muévelas suavemente en el aire como si fuera en bicicleta. Este movimiento puede ayudar a tu pequeño a expulsar gases y estimular su digestión si está estreñido.

II. Prueba un masaje de barriguita

Darle a tu bebé algunas caricias en el vientre puede estimular el flujo de los gases atrapados, ya que su objetivo principal es mover el aire dentro de los intestinos del pequeño hacia la salida.

Aquí encontrarás algunas técnicas de masaje descritas en el libro Infant Massage: A Handbook for Loving Parents (en español, Masaje infantil: Un manual para padres amorosos) de Vimala McClure.

❗ Como se mencionó al principio de este artículo, consulta con un profesional antes de probar cualquier remedio casero con tu bebé. Si obtienes su aprobación, asegúrate de que tu pequeño esté alerta, tranquilo y feliz cuando comiences con el masaje. De lo contrario, páralo de inmediato.

✅ Inicia el masaje al menos 45 minutos después de alimentar a tu bebé para disminuir el riesgo de vómitos. Si los brazos de tu pequeño parecen rígidos o él no te mira, detén el masaje y espera algún otro momento para probarlo.

✅ Mantén el contacto visual durante el masaje. Comienza con movimientos muy suaves. Mientras tu bebé parezca estar contento, puedes aumentar la presión a medida que vayas avanzando.

Manecillas de un reloj

Imagina que la barriguita de tu bebé es la esfera de un reloj. Presiona y desliza las palmas de tus manos en el sentido de las agujas, empezando por las 7 u 8 horas, yendo de izquierda a derecha en forma de un semicírculo. Mientras masajeas a tu pequeño, una mano debe seguir a la otra.

Remando

Coloca las palmas de tus manos sobre el estómago de tu bebé, horizontalmente. Luego presiona suavemente cerca de su caja torácica y realiza movimientos descendientes a lo largo de su barriguita, alternando las manos.

Fieltrando

Coloca tus pulgares planos a cada lado de la barriguita de tu bebé, justo encima de su ombligo. Después, presiona suavemente y desliza los pulgares hacia sus costados, separándolos entre sí.

¡I Love You!

Utiliza esta técnica siguiendo estos pasos:

1. Traza la letra “I” en el lado derecho de la barriguita de tu bebé, junto al ombligo.
2. Dibuja la letra “L” colocada de lado. Comienza en la esquina superior izquierda de la barriguita, muévete hacia el lado derecho y luego abajo.
3. Finalmente, traza una letra “U” invertida. Comienza en la esquina inferior izquierda de la barriguita de tu bebé y ve subiendo. Después, continúa por el torso y luego baja por el lado derecho.

Moonwalk

Coloca tus dedos índice y medio en el lado izquierdo de la barriguita de tu bebé, justo encima del ombligo. Después, “camina” deslizando suavemente ambos dedos por su torso, moviéndolos hacia el lado derecho.

III. Ayuda a tu bebé a eructar

Eructar puede ayudar a tu bebé a deshacerse del aire que pudo haber tragado durante la alimentación. Antes de probar las siguientes técnicas, ten en cuenta estas recomendaciones:

• Coloca una toalla o un babero debajo de la barbilla de tu bebé para evitar las manchas desagradables de la regurgitación.
• Ahueca tu mano mientras das palmaditas a la espalda de tu bebé. Esto hará que los movimientos sean más suaves para el pequeño que si mantienes la palma de tu mano plana.
• Trata de hacer eructar a tu bebé durante y después de alimentarlo.

Método 1

Siéntate y sostén a tu bebé erguido contra tu pecho, con la barbilla apoyada en tu hombro. Mantén al bebé con una de tus manos mientras le das palmaditas suaves en la espalda con la otra.

Método 2

Sienta al bebé en tu regazo. Sostén su pecho y la cabeza con una de tus manos. Para ello, sujeta la barbilla del pequeño con la palma de tu mano y coloca el borde de esta sobre su pecho. Después, dale palmaditas en la espalda con la otra mano.

Método 3

Tumba a tu bebé bocabajo en tu regazo. Sostén su cabeza, asegurándote de que esté más alta que su pecho. Después, dale palmaditas suaves en la espalda.