A qué profundidad viven los diferentes peces y otros habitantes del mundo submarino
No es ningún secreto que en el agua viven peces, cangrejos, tortugas marinas y sepias. Sin embargo, el océano puede llegar a ser muy profundo y cada animal tiene un lugar determinado donde vivir. Algunos habitan cerca de la superficie, mientras que otros pueden encontrarse solo en el fondo.
En Ideas en 5 minutos te contaremos cuáles son las características principales de las distintas zonas del océano de acuerdo con su profundidad. Además te nombraremos algunos de los animales que habitan en cada una de ellas.
La profundidad del océano
Los científicos suelen dividir la enorme columna de agua del océano en 5 zonas principales según la profundidad. Se denominan epipelágica, mesopelágica, batipelágica, abisopelágica y hadopelágica. Cada una de estas zonas tiene una temperatura, iluminación y presión diferentes, así como una composición química del agua desigual: se observan diferencias en los indicadores de salinidad, en los niveles de oxígeno y en las concentraciones de varios oligoelementos.
En consecuencia, los organismos vivos que habitan estas zonas serán diferentes: no se debe esperar que los peces que están acostumbrados a las condiciones de la zona superior bien iluminada y cálida se sientan cómodos en las zonas inferiores de la columna de agua. Hablemos de los habitantes de cada una de estas zonas con más detalle.
Zona epipelágica
La zona epipelágica se extiende desde la superficie del agua hasta unos 200 m por debajo de ella. Esta es la parte del océano más iluminada por el sol, en la que viven muchos organismos fotosintéticos, es decir, aquellos que pueden convertir la luz solar en energía necesaria para la vida. En la zona epipelágica habitan muchas algas como el sargazo, varios peces como el arenque, las anchoas, el atún, los tiburones ballena y mamíferos como los delfines.
Zona mesopelágica
Esta es la llamada zona crepuscular. Aquí entra muy poca luz solar. Muchos habitantes de la zona mesopelágica tienen ojos bastante grandes. Esta zona se extiende desde los 200 m por debajo de la superficie del agua hasta los 1000 m (1 km) de profundidad. La presión aquí aumenta en 1 atmósfera cada 10 m, y la concentración de nutrientes disminuye. Sin embargo, el 90 % de todos los peces del mundo (alrededor de 10 mil millones de toneladas) viven aquí. La zona mesopelágica es el hábitat de organismos como el calamar, el bagre, la sepia y los peces (por ejemplo, la merluza negra antártica).
Zona batipelágica
Esta zona ya está completamente desprovista de la luz del sol, la luna o las estrellas. Y, sin embargo, se puede observar algún brillo, ya que algunos de los organismos que viven aquí son bioluminiscentes. La zona batipelágica cubre un área de 1000 a 4000 m. Aquí la presión es abrumadoramente alta, y el nivel de oxígeno es muy bajo.
Los habitantes típicos de estas aguas son el pez bruja negro, el calamar vampiro y el tiburón polar. Han aprendido a adaptarse a condiciones específicas: tienen un metabolismo lento, así como una dieta no especializada. En otras palabras, comen todo lo que encuentran, sin muchas opciones. Además, prefieren no desperdiciar energía en rastrear presas, sino esperar hasta que estén cerca.
Zona abisopelágica
La zona abisopelágica es el espacio que hay desde una profundidad de 4000 m hasta el fondo del océano. Su nombre proviene del griego antiguo ἄβυσσος (“sin fondo”): viene de la época en la que se creía que el océano no tenía fondo. Entre los pocos seres vivos que pueden sobrevivir a una temperatura tan baja, una presión enorme (600 veces superior a la normal) y una oscuridad total, se encuentran el pepino de mar, la araña de mar, el pez trípode y el pulpo.
Zona hadopelágica
Esta zona incluye las fosas oceánicas, es decir, lugares más profundos que el fondo oceánico habitual. Poco se sabe sobre las criaturas que viven a semejantes profundidades. Los científicos han descubierto que aquí se pueden encontrar gusanos de cerdas, moluscos bivalvos, anguilas branquiales y babosas de mar.