Cómo acariciar a tu gato en los lugares adecuados
Saber cómo interactuar con tu amigo esponjoso correctamente es la forma ideal de construir un vínculo con él. Por supuesto, cada gato es diferente, por eso es importante encontrar un enfoque particular que se adapte mejor a tu mascota. Sin embargo, hay algunos lugares especiales para acariciar a los que la mayoría de los felinos no podrán resistirse. Por eso, Ideas en 5 minutos está listo para contarte todo sobre ellos.
Primero, preséntate
No sorprendas a tu gato con caricias repentinas. Esto puede provocar que se ponga muy a la defensiva y se muestre reacio a recibir mimos de tu parte. Extiende los dedos y acerca lentamente las manos a la cara del felino. Deja que te huela para que entienda que no representas ningún peligro y que puede confiar en ti.
Inicia por las áreas que les gustan a los gatos
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Parte posterior de la cabeza: comienza rascando suavemente la parte posterior de la cabeza y el cuello del gato. Frota siempre en la dirección del crecimiento del pelaje.
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Base de las orejas: algunos gatos también disfrutan de suaves caricias en esta área. Con los dedos, frota suavemente a lo largo de la base de las orejas y la frente.
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Área de la barbilla: algunos gatos disfrutan las cosquillas debajo de la barbilla. Puedes intentar acariciarlo en esta zona con la punta de tus dedos y ver si le gusta este tipo de caricias.
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Por encima de la cola: con caricias lentas y rítmicas, baja por el lomo del gato y presta especial atención a la zona final. Rasca ligeramente esta área para darle un gusto adicional a tu felino. Sin embargo, evita la cola, ya que a los gatos no les gusta que les toquen esta parte. Asegúrate de acariciar siempre de la cabeza a la cola, no al revés.
Áreas que debes evitar
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Vientre: a los gatos generalmente no les gusta que los acaricien allí, ya que exponer esta área puede hacerlos sentir vulnerables e indefensos.
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Cola: la cola de un gato es un área muy sensible con muchas terminaciones nerviosas y ligamentos. Esta parte del cuerpo juega un papel importante en su equilibrio y movilidad general. No disfrutan cuando les tocan la cola, así que es mejor que la dejes en paz.
Señales de que un gato disfruta las caricias
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Mantiene la cola erguida, agitándola ligeramente de lado a lado. No le importa estar en contacto con tu mano.
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Ronronea.
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Empieza a “amasar” con sus patas.
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Su postura es relajada y sus orejas apuntan hacia adelante.
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Te da un pequeño empujón cuando llegas a acariciarlo.
Señales de que a un gato no le gusta que lo toquen
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Intenta alejarse de ti.
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No reacciona a tus toques y permanece pasivo. Nunca ronronea ni “amasa” con sus patas.
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Intenta acicalarse después de que lo tocas.
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Hace movimientos bruscos con su cola.
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Sus orejas se mantienen planas sobre su cabeza y se giran hacia atrás.
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Hace movimientos rápidos hacia tu mano o hacia ti, intentando morderte o pelear contigo.