Cómo limpiar una caja de arena
Los gatos son animales muy limpios que muestran un comportamiento arraigado para enterrar sus desechos, de ahí la importancia de una caja de arena. Tener una caja de arena sucia o descuidada no solo es una experiencia desagradable, sino que también puede ser la causa de problemas de salud tanto para ti como para tu gato, por lo que la limpieza adecuada de la caja de arena de tu mascota es de suma importancia.
En Ideas en 5 minutos, hemos preparado esta guía para ayudarte a entender cómo mantener limpia la caja de arena de tu gato.
❗ Importante: evita limpiar la caja de arena de tu gato si estás embarazada o eres una persona inmunocomprometida, ya que corres el riesgo de sufrir diferentes complicaciones derivadas de la toxoplasmosis, que puedes contraer al entrar en contacto con los desechos de tu gato. Se recomienda usar equipo de protección personal durante la limpieza.
1. Limpia la caja de arena al menos una vez al día
El método más efectivo para mantener limpia la caja de arena de tu gato es sacar los desechos regularmente, ya que eso evita que se acumulen. Se recomienda hacerlo una vez al día, aunque deberías considerar hacerlo dos veces al día si tienes más de un gato. Para obtener mejores resultados, usa una pala hecha de plástico grueso o aluminio, para que puedas limpiarla de manera eficiente sin tener que preocuparte por la oxidación.
Se recomienda que primero saques los sólidos de la caja de arena. Luego, para lograr una limpieza más profunda, también debes volcar la caja y golpearla para eliminar los grumos ocultos, además de usar una toallita para limpiar sus lados. Después de limpiar, completa la arena que ya estaba en la caja con arena nueva.
2. Cambia la arena todas las semanas
La limpieza frecuente funciona como una solución rápida para tener una caja de arena limpia y sin olores, pero eso no es suficiente. Para mantener la caja de arena correctamente limpia, se recomienda que también vacíes todo el contenido de la caja de arena una vez por semana, reemplazándola con arena nueva. Presta atención y mira si hay mucha arena húmeda o si de ella sale un olor que persiste incluso después de limpiarla; estos son indicadores de que se debe cambiar toda la arena.
Cuando rellenes la caja de arena, asegúrate de no agregar más de 5 a 7 cm de arena, ya que es posible que tu gato no use la caja de arena si agregas más que eso.
3. Lava la caja de arena de tu gato todos los meses
Vaciar la caja de arena brinda una oportunidad perfecta para lavarla y limpiarla. La frecuencia con la que debes hacerlo dependerá de cuántos gatos tengas y cuán diligente seas para recoger y cambiar la arena, pero no debe pasar más de un mes sin lavar la caja de arena de tu gato.
Al lavar la caja de arena, no optes por productos de limpieza agresivos que sean cítricos o que contengan lejía o amoníaco; el olor de estos productos es desagradable para los gatos y puede disuadirlos de usar la caja de arena. En lugar de eso, usa agua caliente y un jabón o detergente sin perfume para remojar y fregar la caja de arena. Además, se pueden usar otros artículos para el hogar, como vinagre o bicarbonato de sodio, para ayudar a eliminar los olores desagradables persistentes.
4. Reemplaza toda la caja de arena cada año
No importa cuán riguroso seas, eventualmente tendrás que reemplazar toda la caja de arena. Esto sucede porque las cajas de arena generalmente están hechas de plástico y tienen una superficie porosa, que se descompondrá con el tiempo y comenzará a absorber bacterias. Además, el plástico también comenzará a retener olores que tu gato puede detectar.
Cuando elijas una caja de arena nueva, busca una que esté hecha de un plástico más resistente y que tenga las esquinas rectas. De esta manera, tendrás una caja de buena calidad que será más fácil de limpiar.
Bono: medidas adicionales para un proceso de limpieza más fácil
- Utiliza la arena aglomerante, es más fácil de limpiar.
- Coloca una alfombrilla debajo de la caja de arena de tu gato: atrapará cualquier resto de arena que pueda quedar en las patas de tu mascota.
- Usa arena hecha especialmente para la caja de arena.
- Invierte en una caja de arena autolimpiante. Pero ten en cuenta que es posible que tu gato le tenga miedo.