Ideas En 5 Minutos
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Cómo hacer una ducha al aire libre

Instalar una ducha al aire libre puede ser una gran idea, especialmente durante la época más calurosa. Un dispositivo sencillo puede ayudarte a refrescarte y sobrevivir cómodamente a los días de calor.

En Ideas en 5 minutos, te informamos sobre diferentes opciones de instalar una ducha para el exterior.

Una ducha sencilla con una manguera de jardín

  1. Adquiere un cabezal de ducha y colócalo a una manguera de jardín.
  2. Elige un árbol lo suficientemente alto en tu jardín y envuelve la manguera alrededor de la rama 4 o 5 veces para evitar que se desenrolle.
  3. Para crear una pantalla que te oculte de las miradas indiscretas, puedes utilizar un aro viejo. Fija en él los bordes de la cortina de ducha y luego cuelga la estructura en la misma rama que la manguera con el cabezal.
  4. Para garantizar un buen drenaje, puedes cubrir la zona debajo de la ducha con grava.
  5. Conecta la manguera al sistema de plomería de tu casa y puedes utilizar la ducha.

Una bolsa de ducha

Si es importante para ti que la ducha sea móvil, utiliza una bolsa de ducha negra especial.

  1. Conecta una manguera con un cabezal de ducha a la bolsa, llénala con agua y déjala al sol. Espera un rato para que el agua en la bolsa se caliente bien.
  2. Cuelga la bolsa con agua en un lugar conveniente: por ejemplo, en la rama de un árbol, en un canalón que sobresale del tejado, etc.
  3. Deja que el agua fluya libremente por gravedad y toma una ducha.

Un diseño más serio y duradero

Si necesitas una ducha al aire libre todo el tiempo, puedes elegir un lugar especial para ella e instalar allí la cabina de ducha.

  1. Planifica un lugar de drenaje.
    Antes de construir la base y el plato de ducha, prepara un desagüe y conéctalo al sistema de alcantarillado de tu casa. También puedes organizar un desagüe que redirija el agua que sale de la ducha hacia el jardín. Otra opción es construir un pozo seco lleno de grava que permitirá que el agua penetre lentamente en la tierra.
  2. Prepara una base o instala un plato de ducha.
    Si has conectado previamente el desagüe de la ducha a la alcantarilla, puedes rellenar la base con hormigón o utilizar otro material no poroso. En este caso, la base debe tener un filtro de drenaje y una pendiente que permita redirigir el agua de la base al desagüe principal.
    Si optas por no conectar el desagüe a la alcantarilla, utiliza adoquines de cemento, bases de madera o suelo compuesto como base para la ducha. También puedes adquirir un plato de ducha ya hecho y simplemente instalarlo.
  3. Construye paredes o una cabina de ducha.
    Para las paredes de la ducha puedes utilizar listones de madera, piezas de vinilo rígido u otro material duradero que pueda soportar el peso del cabezal de ducha y el elemento de calefacción. Si lo prefieres, puede colocar una puerta o una cortina para la entrada de la ducha.
    Puedes dar rienda suelta a tu creatividad y diseñar la cabina de ducha como te apetezca.
  4. Instala un soporte para el cabezal de ducha.
    Clava en el suelo una estaca de metal de unos 2 m de largo junto al plato de ducha y sujeta en ella un soporte para el cabezal de ducha (o un tubo de metal que se conecta al cabezal) con bridas para cables.
  5. Conecta el agua.
    Conecta una manguera de jardín con un extremo al soporte para el cabezal de ducha y con el otro, a tu sistema de plomería.
    Si no planificas utilizar agua corriente, puedes instalar un depósito de agua en la parte superior de la estructura y dejar que el sol la caliente durante varias horas. En cuanto el agua esté caliente, conecta una manguera directamente al cabezal de ducha y mete su otro extremo en el depósito de agua.
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