Cómo diferenciar un verdadero chocolate de una barra de repostería
Un buen chocolate cuesta más que una barra de repostería, pero esta diferencia se compensa en la calidad del producto. El sabor, textura, contenido de cacao e incluso el aroma determinan si disfrutarás de una delicia o no sentirás nada más que restos pegados a tus dientes. No se puede ocultar una base de mala calidad en la composición detrás del caramelo, nueces y otros aditivos, porque hay ingredientes sin los cuales un verdadero chocolate es impensable.
En Ideas en 5 minutos te enseñaremos los principios para elegir un chocolate de buena calidad, desde el análisis de la composición en el empaque hasta las diferencias en el sabor.
En qué se diferencian las composiciones
La base del chocolate está hecha de granos de cacao. Al prepararse, solo se puede utilizar una variedad o mezclarla con otras para obtener las características deseadas. Primero, los granos se limpian, y después se tuestan a bajas temperaturas para revelar su aroma. Luego se muelen finamente para obtener la masa de cacao.
Esta pasta, cuando se somete a una presión demasiado alta, otorga dos productos: cacao en polvo y manteca de cacao. También se puede mezclar la masa de cacao con una gran cantidad de manteca de cacao y edulcorantes para hacer chocolate. Básicamente, los primeros pasos consisten en mezclar, moler y triturar diferentes ingredientes crudos para convertirlos en una pasta.
Los ingredientes utilizados dependen del tipo de chocolate que se quiera obtener:
- Para el chocolate amargo se requiere solo masa de cacao, manteca de cacao y azúcar.
- Si a la composición del chocolate amargo se le agrega leche en polvo, entonces se obtiene chocolate con leche.
- El chocolate blanco se elabora con manteca de cacao, azúcar y leche en polvo. No se utiliza masa de cacao. Por eso algunos no lo consideran un chocolate de verdad.
❗️Las grasas vegetales, números E, saborizantes artificiales, lecitina de soya, polirricinoleato de poliglicerol, vanilina y los emulsionantes son señales características de un falso chocolate. En la barra de repostería no se utiliza manteca de cacao, sino que se reemplaza por alternativas grasas más baratas, como el aceite de palma.
Por qué es tan importante la manteca de cacao
La manteca de cacao es el ingrediente clave que hace a un chocolate tan apetitoso. Comienza a derretirse a una temperatura más baja que la del cuerpo humano. Como resultado, se puede sentir que el chocolate se derrite en la lengua en cuanto entra a la boca.
La manteca de cacao debe de ser el segundo o tercer ingrediente en la composición (la masa de cacao debe de ser el primero). Siempre los productos con un mayor contenido en su composición se enumeran primero y luego en orden descendente en cuanto a cantidad.
Un verdadero chocolate no puede prescindir de la manteca de cacao, la cual crea la textura necesaria. Requiere de un procedimiento especial durante el proceso de fundición llamado templado. Gracias a esto, el chocolate refrigerado y listo para su consumo posee un buen brillo, textura crujiente y sabor.
⚠️ Con el paso del tiempo, en el chocolate pueden aparecer manchas blancas o grises. Esto se debe a que la manteca de cacao se separa de los sólidos de cacao y sale a la superficie.
En qué consisten las características distintivas del chocolate
Como dicen los expertos, un verdadero chocolate es capaz de activar y desertar nuestros 5 sentidos: el gusto, el olfato, la vista, el oído y el tacto. Precisamente debe de ser por esta inusual cualidad que surgió la expresión “El chocolate nunca miente”.
- Un verdadero chocolate será liso y brillante, sin ningún tipo de fisuras y arañazos.
- Se puede partir en pedazos perfectamente iguales y escuchar su característico chasqueo.
- Un chocolate original no se pega a los dientes ni al paladar. Se derrite con facilidad si lo sostienes en la palma.
- El aroma característico del cacao es muy pronunciado. También tiene un exótico sabor único.
Respectivamente, una barra de repostería no tendrá un fuerte aroma y su sabor no será tan intenso. Además, se quedará pegada en los dientes, ya que su punto de fusión es más alto que el del verdadero chocolate.