Cómo elegir una buena miel
Por sus características, la miel natural es muy apreciada en medicina, cosmetología y dietología. Tiene propiedades antioxidantes y antisépticas, y es una alternativa más saludable que el azúcar.
Pero todo esto solo se relaciona con la miel auténtica y no se aplica a los productos con aditivos.
Ideas en 5 minutos te dirá cómo distinguir la miel real de un sustituto.
Características de la miel natural
- Color
El color de la miel depende directamente de las flores de las que fue recolectada por las abejas. Puede variar de café oscuro a café claro, lo que no indica su calidad de ninguna manera. Con el tiempo, el producto también puede cambiar ligeramente su color y oscurecerse. - Dulzura
La miel natural contiene dos tipos de azúcar: fructosa y glucosa, por lo que es ligeramente más dulce que el azúcar blanco.
- Transparencia
La verdadera miel contiene polen, por lo que suele ser poco transparente. El proceso de destilación solo elimina las grandes motas de cera o residuos, dejando el polen. Al elegir un producto, recuerda que cuanto más procesada esté la miel, más transparente será.
Sin embargo, ten en cuenta que la buena miel en frasco tiene un aspecto homogéneo. Si observas que el producto se ha dividido en dos capas, esto puede indicar que la miel que ves no está madura. No se conservará durante mucho tiempo, por lo que deberás consumirla en los próximos meses. - Contenido de agua
La larga vida útil de la miel (y si se almacena adecuadamente, infinitamente larga) se debe al bajo contenido de agua en el producto natural. Se considera que una buena miel no contiene más de un 18 % de líquido, lo que impide que las bacterias y los microorganismos se desarrollen en ella.
❗ Además, es higroscópica, lo que significa que absorbe fácilmente la humedad del aire cuando no está cubierta. Si se almacena de forma inadecuada, se puede provocar la fermentación de la miel y reducir su vida útil.
✅ Para saber qué miel contiene menos agua, voltea 2 frascos del producto a la misma temperatura con las tapas hacia abajo y observa qué tan rápido suben las burbujas de aire dentro del recipiente. En el frasco donde las burbujas lleguen al fondo más rápido, habrá más agua.
- Cristalización
Se cree que la miel no debe cristalizarse en los 3 meses siguientes a la primera apertura del frasco, pero no siempre es así. Algunas mieles pueden permanecer líquidas durante mucho tiempo, mientras que otras pueden cristalizar al cabo de un par de semanas. Esto no es una indicación de su calidad y no demuestra si el producto es natural o no. - Aroma
La verdadera miel siempre tiene un agradable y dulce aroma floral. Un olor agrio o la ausencia de cualquier fragancia pueden indicar que tienes en manos una falsificación.
- Viscosidad
Sumerge una cuchara o un palito fino en el recipiente con miel y luego observa cómo el producto fluye de regreso al frasco. La miel verdadera desciende en un hilo continuo y forma una pequeña colina en la superficie, que luego se extiende lentamente desde el centro hacia los bordes. La falsa se comportará como pegamento, goteando y salpicando. - Sabor
La miel suele tener un sabor ligeramente picante y ácido, pero se disuelve en la lengua sin dejar rastros. Si notas granos de azúcar, probablemente el producto sea falso.
Cómo comprobar si la miel es natural o no
Si no pudiste comprobar la naturalidad de la miel con los criterios anteriores, prueba los siguientes métodos.
1. Toma una hoja de papel sin recubrimiento, preferiblemente poroso, y gotea un poco de miel sobre ella. Si la gota se esparce sobre el papel, formando una mancha húmeda o se filtra a través de él, entonces tienes una falsificación en tus manos.
2. Intenta dejar un trozo de pan en el frasco con el producto y sacarlo después de unos 10 minutos. Debido al bajo contenido de agua en la miel natural, el pan no se desarmará y permanecerá firme. Si con el tiempo notas que este se ha ablandado, entonces lo más probable es que no sea miel, sino jarabe de azúcar.
3. Toma 2 vasos de agua y disuelve una pequeña cantidad de miel en cada uno de ellos. Agrega al primero 4-5 gotas de yodo, y al segundo la misma cantidad de vinagre. Ten en cuenta que nada debe cambiar en los vasos. Si la mezcla se vuelve azul en el recipiente con yodo, significa que el fabricante usó almidón al fabricar el producto. Si el agua demuestra reacción en el vaso con vinagre, significa que se le ha agregado tiza.
4. Deja caer un poco de miel sobre una superficie dura y luego espolvorea almidón encima. Este creará una “capa” blanca en el producto verdadero, mientras que la miel falsa lo absorberá.
Cómo almacenar la miel
- No todos los recipientes son adecuados para almacenar la miel correctamente. Contiene ácidos que pueden oxidar las superficies metálicas, reduciendo las propiedades útiles del producto. La mejor manera de almacenarla es en recipientes de vidrio, arcilla o madera, siempre bien tapados.
- La miel natural contiene vitaminas y minerales que no soportan las altas temperaturas. Si decides derretir miel cristalizada, no la calientes a más de 60 grados para preservar las propiedades beneficiosas del producto. Además, no almacenes la miel cerca de fuentes de calor como una estufa o un calentador.
- Lo mejor de todo es almacenar la miel en un lugar fresco lejos de la luz solar. Entonces no solo seguirá siendo sabrosa, sino que también conservará sus propiedades beneficiosas.