Cómo elegir y almacenar plátanos
El proceso de maduración de los plátanos es muy rápido. Las diminutas semillas liberan una mezcla de etileno y dióxido de carbono, lo que hace que la fruta se vuelva oscura. Elije plátanos maduros (amarillos con manchas de color café) para el uso inmediato y amarillo verdoso para consumirlos más adelante.
Ideas en 5 minutos te ayudará a mantener los plátanos frescos durante más tiempo indicando cómo puedes almacenarlos correctamente.
Determinación de la madurez por el color de un plátano
🔶 Verde. La etapa inicial, cuando la fruta aún no está madura. Es firme al tacto y no emite aroma a plátano. La cáscara está tan pegada a la base que hay que cortarla con un cuchillo para llegar al interior de la fruta. La pulpa en sí es firme, completamente almidonada y no muy dulce.
🔶 Amarillo verdoso. Los plátanos apenas verdes son firmes, pero al apretarlos se sienten un poco más blandos que los completamente verdes. Tienen un olor resinoso pronunciado. El sabor es mitad almidonado, mitad dulce, con un gusto astringente leve.
🔶 Amarillo. Muchos consideran que esta etapa de madurez es ideal para estas frutas. Son fáciles de morder, se siente un sabor cremoso en la boca, mayormente dulce. Aroma a plátano pronunciado.
🔶 Con manchas de color café. La cáscara se vuelve más fina y se desprende con mayor facilidad. El interior de la fruta es muy suave, dulce y aromático.
🔶 Color café oscuro. En esta etapa, los frutos demasiado maduros pierden su integridad estructural y adquieren una textura suave. La pulpa se vuelve más delgada y gradualmente transparente, acercándose con lentitud a convertirse en un puré almibarado y azucarado.
Peculiaridades del almacenamiento
La regla básica que hay que saber a la hora de almacenar plátanos es evitar el refrigerador antes de que la fruta esté madura. Las bananas crecen en los trópicos y generalmente no toleran las heladas. Por lo tanto, lo mejor es dejarlas a temperatura ambiente. Si las colocas estando verdes en el refrigerador, esto inhibirá su capacidad de maduración y no podrán reanudar este proceso, incluso si vuelven a sus condiciones anteriores.
Cuando los plátanos están maduros, pueden refrigerarse. Pero ten en cuenta que, de todos modos, se volverán oscuros. Sin embargo, esto no afectará a la fruta: también se puede comer.
Usa una envoltura de plástico para almacenar los plátanos en interiores. Hay dos formas de hacerlo:
🔷 Envuelve todos los tallos en un manojo a la vez con papel film. Este método evita que el gas etileno, que se produce naturalmente durante el proceso de maduración, entre en otras partes de la fruta y la protege contra la maduración prematura. Sin embargo, ten en cuenta que no se puede evitar completamente que pequeñas áreas abiertas tengan contacto con el etileno. Pero sigue siendo mejor que nada.
🔷 Separa los tallos entre sí y luego envuelve cada uno con papel film. Dado que los plátanos en racimos maduran a diferentes velocidades, los que lo hacen prematuramente liberarán más gas etileno, lo que solo acelerará la maduración del resto de las frutas. Por lo tanto, este método podría funcionar más eficientemente.