Cómo elegir la mejor papa para cualquier receta
Puede ser difícil saber qué tipo de papas usar al cocinar recetas específicas, ya que hay muchas variedades de ellas.
Con eso en mente, en Ideas en 5 minutos creamos una guía para ayudarte con esto.
1. Papas red bliss
Este tipo de papa es excelente para hervir y no se dora cuando se fríe o se tuesta. Su piel es roja y su carne es blanca. Las papas red bliss se clasifican como cerosas, pero también son húmedas y tienen un alto contenido de azúcar. Por último, cuando se aplastan, verás que también pueden volverse gomosas.
2. Papas russet
Estas también se pueden llamar papas viejas, rojizas, papas para hornear o incluso papas de Idaho cuando se cultivan específicamente allí. Son mejores para hornear, hacer puré o incluso freír. Su piel es rugosa, de un color pardusco y con varios “ojos”. Cuando se cortan, se encuentra una pulpa blanca. Las papas russet tienen poca humedad, pero un alto contenido de almidón, por lo que se cocinan secas y esponjosas.
3. Papas amarillas
Puedes usarlas en platos que requieran hervir, cocer al vapor, asar, asar a la parrilla o gratinar (espolvoreadas con pan rallado o con queso rallado). A menudo tienen almidón de bajo a medio, con una textura cremosa pero húmeda y suculenta. Su sabor es mantecoso, y en cuanto a su piel, comúnmente es amarilla y delgada, con una pulpa dorada.
4. Papas Kennebec
Este es un tipo de papa para todo uso que puede mantener su forma cuando se cocina. Son ideales para papas fritas, papitas e incluso croquetas de papa. Su piel es fina y bronceada, con manchas marrones y carne rica en almidón (amilopectina).
5. Papas violetas
Las papas violetas tienen una piel muy distintiva que va de azul grisáceo a morado, y su pulpa suele ser azul. Son bajas en almidón y se pueden preparar de muchas maneras diferentes. Por ejemplo, se pueden hervir, cocer al vapor, asar, freír, aplastar o incluso agregar en guisos, ensaladas o gratinar (espolvorear con pan rallado o con queso rallado).
6. Papa Ratte
Las papas Ratte son ideales para hacer purés. Son densas y contienen mucha grasa. También encontrarás que su piel es similar a la de las papas amarillas, con pulpa cerosa y amarilla. Mantienen bien su forma cuando se cocinan e incluso pueden ser una gran adición a las carnes asadas.