Qué alimentos cocinamos o freímos demasiado y qué hacer para arreglarlo
Es probable que a cada uno de nosotros al menos una vez en la vida se nos haya pasado el arroz, los fideos, o hayamos cocinado la carne demasiado. Sucede que te distraes solo un minuto, y entonces la cena ya queda arruinada. Afortunadamente, muchas veces no todo es tan grave como parece, por lo que la situación puede corregirse.
En Ideas en 5 minutos te contamos qué alimentos solemos cocinar demasiado y cómo se puede solucionar.
Verduras
Es bastante fácil pasarse a la hora de cocinar o freír verduras, por lo que pueden convertirse en una especie de puré. Por ejemplo, planeaste hacer una guarnición de verduras, pero algo salió mal y el contenido de la sartén se hizo medio raro. Que no cunda el pánico: tal vez no todo está perdido.
- Agrega un poco de caldo y crema a las verduras, revuelve y convierte la guarnición fallida en una gran sopa.
- Aplasta las verduras que se hayan freído demasiado, mézclalas con puré de papas y un poco de almidón, haz bolitas y fríelas.
- Si las verduras no se pasaron demasiado y solo están un poco blandas, puedes intentar salvarlas. Para ello, sumérgelas en un recipiente con agua helada limpia. Esto podría arreglar la situación.
Papas
Muchos creen que cocinar papas es fácil. Sin embargo, los errores también son posibles aquí, ya que las diferentes variedades se comportan de manera distinta durante la cocción.
- Las variedades harinosas más almidonadas, como russet, se vuelven secas y desmenuzables. Para salvar la situación, se puede hacer puré con ellas.
- Las variedades con bajo contenido de almidón, que se llaman cerosas, se deben rociar suavemente con aceite y freír.
- Las papas blancas, rojas y las Yukon Gold son bastante resistentes a las altas temperaturas prolongadas. Pero si se pasaron, es mejor aplastarlas y hacerlas un puré.
Arroz
No te apresures a tirar el arroz pasado: es posible que se pueda arreglar.
- Si el arroz se pasó apenas un poco y la textura no está particularmente dañada, se puede recuperar. Para hacer esto, drena toda el agua de la cacerola y pon la guarnición en una capa delgada sobre una bandeja para hornear. Luego calienta todo en el horno a 180 °C durante unos 5 minutos.
- Si el arroz se pasó un poco y no está muy almidonado, intenta drenar el exceso de agua y enjuagarlo. Luego caliéntalo nuevamente en la estufa para que se evapore toda la humedad.
- Si el arroz tiene exceso de agua y es difícil de drenar, intenta usar pan. Coloca un trozo de pan duro encima y cubre la olla con una tapa. Baja el fuego y espera unos minutos; este debería absorber la humedad.
- Si el arroz pasado ya no se puede salvar, puedes hacer pudín con él.
Fideos
Los fideos son un producto rápido de preparar que a muchos les encanta. Sin embargo, pueden arruinarse fácilmente si se cocinan demasiado. Si planeabas hacer pasta al dente, pero algo salió mal, puedes usar los siguientes trucos.
- Escurrir los fideos pasados en un colador y enjuagar con agua fría, agregando unos trozos de hielo encima. Esto enfriará rápidamente la pasta y detendrá el proceso de cocción.
- Los fideos pasados se pueden saltear a fuego lento con un poco de mantequilla o aceite de oliva. Esto los hará crujientes. Y un poco de ajo o queso parmesano ocultará el sabor “frito” del platillo.
- La pasta demasiado blanda se puede mezclar con una salsa. Esto enmascarará el sabor viscoso a fideos demasiado cocidos. Agrega verduras crujientes como calabacitas o pimientos para darles un toque más firme.
Pollo
El pollo se considera una posible fuente de salmonela. Para estar seguros, muchos lo cocinan durante mucho tiempo. Debido a esto, se seca y comienza a adherirse a los dientes al masticar. Para corregir la situación, se puede usar salsa.
Carne vacuna
La carne vacuna es muy popular y utilizada en muchos platillos. Si por accidente la dejaste en el fuego más tiempo del necesario, prueba los siguientes trucos.
- Un filete que fue demasiado freído se puede convertir en tacos improvisados, cortándolo en rodajas finas. Sirve el platillo con salsa.
- La mantequilla también puede salvar un filete de este tipo. Ve sumergiendo la carne en ella o derrite un trozo directamente sobre el filete.
- Si has freído demasiado un trozo grande, intenta hervirlo. Pon la carne en una cacerola, vierte caldo y cocina hasta que quede tierna.
- También puedes cortar la carne pasada y guisarla con salsa.
- La carne pasada se puede convertir en una especie de puré. Agrega un poco de mantequilla, grasa o manteca de cerdo y sazona con especias adecuadas. Este puré se puede usar para hacer albóndigas o empanadas, y también como relleno para ravioles.
Carne de cerdo
A la hora de preparar carne de cerdo, muchos tienen miedo de cocinarla poco y terminan haciéndolo demasiado.
Pescados y mariscos
Los pescados y mariscos pueden ser la cena perfecta. Pero si te distraes, aunque sea un poco, el platillo corre riesgo de echarse a perder.
- Si por accidente freíste demasiado un pescado de mar, como el salmón, no te apresures a tirarlo. Para remediar la situación, engrásalo con mantequilla o vierte sobre él una salsa de crema.
- Los camarones y los ostiones demasiado freídos se pueden salvar guisándolos en una mezcla de aceite y jugo de limón.
- En el caso de los mariscos muy freídos, especialmente los crustáceos, todo es más difícil, ya que se vuelven muy duros.