Cómo elegir el labial rojo
El labial rojo es todo un clásico al que muchas mujeres no pueden resistirse. Puede darte un aspecto glamoroso si sabes cómo elegir el tono adecuado.
En este artículo, en Ideas en 5 minutos hemos investigado cómo puedes usarlo.
1. Considera el tono de tu piel
Para elegir el lápiz labial rojo perfecto para ti, tienes que conocer los subtonos de tu piel y los tonos del lápiz labial, y también cómo encajan entre sí. El tono de la piel es el nivel de melanina en la misma, que varía desde muy claro hasta oscuro, mientras que los subtonos son los colores (rojo, amarillo o azul) que crean tu tez específica dentro del tono de tu piel.
- Se consideran tonos cálidos aquellos que tienen más subtonos amarillos y melocotón.
- Se consideran tonos fríos aquellos que tienen más subtonos azules o rosados.
- Se consideran tonos neutros aquellos que no tienen tonos fríos ni cálidos o tienen ambos.
💄 Nota: Para identificar los subtonos de tu piel, mira tu muñeca: si las venas se ven moradas, entonces tienes subtonos fríos, y si se ven verdes, entonces tienes subtonos cálidos.
2. Elige un labial rojo para tu cutis
Piel muy clara: la tez clara tiene principalmente subtonos rosados.
- Utiliza rojos con base azul o rojos con base rosa, como los tonos frambuesa. Estos tonos de labiales rojos resaltarán los tonos rosados de tu cutis haciendo que tu sonrisa se destaque.
Piel clara: los cutis claros suelen ser neutros o cálidos.
- Utiliza un rojo ligeramente anaranjado para complementar su tono de piel. Estos lápices labiales captarán los subtonos dorados e iluminarán tu tez.
Piel media: una persona con piel media, probablemente, quiera cambiar el tono del labial rojo en función de la estación del año porque su piel gana y pierde el bronceado con facilidad.
- En verano, utiliza labiales rojos a base de naranja para complementar tu piel bronceada y aportarle un aspecto luminoso a tu cutis. En invierno, opta por un rojo con base azul, que complementará el tono más claro de tu piel y hará que tus dientes se vean más claros.
Piel oliva: la piel del tono oliva tiene un subtono amarillo verdoso que se broncea muy fácilmente.
- Utiliza un labial rojo color ladrillo u óxido para completar tu tez bronceada y darle calidez.
Piel caramelo: una tez de tono caramelo tiene un subtono amarillo.
- Utiliza un rojo cereza auténtico para hacer que tu tono sea más cálido, lo que iluminará tu sonrisa.
De piel morena dorada a la oscura: la tez morena dorada a oscura tiene un subtono amarillo. Este tipo de piel tiene la suerte de poder elegir diferentes tonos de labial rojo.
- Para una imagen glamorosa, elige un rojo auténtico, que captará la calidez de tu piel y creará una tez más clara. Si quieres tener un aspecto más natural, utiliza rojos con base azul, como el “sangre de buey”.
Piel profunda: las personas de piel profunda pueden usar diferentes tonos de labial rojo.
- Utiliza un rojo con base de naranja para un look más atrevido. Y para un aspecto más natural, opta por un rojo con base azul, como el merlot. Ambos tipos de rojo completarán el tono de tu piel, creando una sonrisa radiante.
3. Mantenlo sencillo
Lo bueno del labial rojo es que puedes mantener el maquillaje al mínimo. Su color en sí mismo da vida a tu piel. Si no estás segura de cómo completar tu imagen junto con un labial rojo, lo único que tienes que hacer es igualar el color de tu piel con polvos, peinarte las cejas y ya estás lista.
4. Tres cosas que hay que hacer para mantener el labial rojo en su lugar
El único problema que puedes encontrar al usar un labial rojo es que el color puede correr más allá de los bordes de los labios y luego ser difícil de quitar de la piel. Puedes hacer lo siguiente para que esto no ocurra:
- Utiliza un delineador de labios para crear un contorno que actúe como un obstáculo para evitar que corran los labiales las formas cremosas.
- Aplica una capa de labial, luego sécala con un pañuelo y después aplica otra capa. Esto no se puede hacer con los labiales mate de formas líquidas.
- Después de aplicar el labial, retira el exceso de color del interior de los labios con la ayuda de un dedo. Para hacerlo, introduce el dedo en la boca, cierra los labios y saca el dedo. Esto liberará el color sobrante que, de otro modo, mancharía los dientes.