Ideas En 5 Minutos
Ideas En 5 Minutos
Cómo enseñar a tus hijos a no darlo todo por sentado

Cómo enseñar a tus hijos a no darlo todo por sentado

Es natural que los padres intenten que sus hijos lleven una vida cómoda. Pero cuando damos demasiado, puede haber un pequeño inconveniente. Dado que todo está disponible para tus hijos, puede causar que pierdan el respeto a la autoridad y sean demasiado consentidos. Sin embargo, esto puede solucionarse haciéndoles comprender el valor de la gratitud, el aprecio y la humildad. En Ideas en 5 minutos te ayudaremos a iniciar este proceso.

1. Vuélvete su modelo a seguir

Los niños tienden a imitar a sus padres y luego basan su aprendizaje en eso. En otras palabras, eres su mayor influenciador. Si deseas que tu hijo no dé todo por sentado, es importante que cultives un sentimiento de gratitud en él. Y esto solo se puede hacer cuando también demuestras gratitud.

2. Enséñale a tus hijos sobre la empatía

A los niños se les debe enseñar cómo su comportamiento puede afectar a otras personas. Es posible que puedas hacer énfasis en algo que te hicieron o dijeron y que pudo lastimarte mucho. Puedes también citar ejemplos de libros y películas para enseñarles empatía. Debes hacerles preguntas como: “Lo que dijo ese personaje fue muy hiriente. ¿Cómo crees que se sintió su esposa?”. De esta forma, puedes ayudar a tu hijo a identificar y etiquetar palabras relacionadas con los sentimientos.

3. Señala con amabilidad si tiene una actitud ingrata

El punto aquí es mencionar su ingratitud siendo específicos, pero sin insultarlos. Si tu hijo a menudo se queja de que no recibe suficientes regalos de cumpleaños, puedes intentar hacerle caer en cuenta de que los regalos cuestan dinero y que las personas se esfuerzan por comprar algo para ellos. Cuando les resaltes de forma constante esa actitud ingrata, ellos tomarán nota de ello. Solo asegúrate de no hacerlos sentir incómodos.

4. Enséñeles a tus hijos a devolver siempre un favor

Entrena a tus hijos para que hagan algo bueno por las personas que puedan necesitar su ayuda, por alguien que se preocupa por ellos o por alguien que los haya ayudado en el pasado. Cuando aprenden a devolver un favor, practican más la gratitud.

5. Empieza a reemplazar el concepto de gratificación y en su lugar implementa un sistema de recompensa

Si tu hijo es demasiado insistente con que le compres un juguete, puedes decirle que debe esperar hasta su cumpleaños o ayúdalo a aprender a ahorrar su mesada para conseguir lo que quiere.

Puedes también reducir sus lujos, como limitar el tiempo frente a la pantalla y el tiempo libre para jugar. Pero nunca mezcles el soborno con una recompensa. En su lugar, desarrolla un sistema de recompensas diciendo algo como: “Hoy fuiste un buen niño, te ganaste un dulce”. De esta manera, se sentirán bien con sus recompensas y también apreciarán todos sus privilegios.

6. Bríndales ejemplos de la vida real

Muéstrales ejemplos concretos de momentos puntuales de agradecimiento y generosidad para que aprendan de estos. Puedes compartir las buenas noticias con tal aprecio que ellos practiquen esos valores a partir de tu comportamiento. Intenta decir algo como “Tenemos un horno nuevo hoy. ¡Tenemos mucha suerte al poder reemplazar el anterior!”.

7. Utiliza “notas de agradecimiento”

A los niños les encanta dibujar, así que puedes enseñarle a tu hijo a hacer una nota de agradecimiento cada vez que haya un momento por el cual deba estar agradecido. Por ejemplo, podrían escribirle a su padre cuando regrese a casa después de un largo día de trabajo.

Compartir este artículo