Cómo inculcar la educación financiera a los niños para que puedan tener éxito en el futuro
Enseñar a los hijos a gestionar el dinero es muy importante. Y no importa si el niño ya esté guardando monedas en una alcancía, ahorrando dinero personal para comprar juguetes o tal vez gane dinero para los estudios con un trabajo a tiempo parcial, ya que los niños pueden aprender importantes lecciones financieras a cualquier edad.
Ideas en 5 minutos comparte formas sencillas pero eficaces de enseñar a los niños de diferentes edades hábitos financieros útiles para ayudarlos a entender los asuntos relacionados con el dinero.
Por qué es importante
La autodisciplina, incluyendo la disciplina financiera, es uno de los factores más importantes para el éxito. La capacidad de renunciar a los beneficios espontáneos en favor de las recompensas futuras es una habilidad que sin duda resultará útil en la vida, y los conocimientos financieros solo contribuyen a ello.
“La persona se encuentra con asuntos de dinero todos los días de su vida, por lo que el dinero es crucial para el éxito, la seguridad y la libertad de poseerlo”, dice Sam Renick, coautor del proyecto Sammy Rabbit, una iniciativa para enseñarles a los niños sobre la educación financiera.
Empezar desde pequeño
Empiecen a los 3-4 años de edad. Explica al niño qué es el dinero, para qué sirve y cómo se ve. Lleva al niño a la tienda y muestra cómo pagas en la caja, que cada artículo tiene su propio precio y explica cuánto trabajas para conseguir dinero. Muéstrale al niño el recibo y explica cuánto cuesta cada producto.
No compres inmediatamente lo que el niño pide
¿Qué niño podría pasar indiferente ante la vitrina de una juguetería brillantemente decorada? No consientas los deseos inmediatos del niño, solo dile que lo hablarán en casa. Y cuando lleguen, sugiere que haga una lista de las cosas que quisiera comprar.
Dibuja todas las cosas que quiere el niño, escribe el nombre, el precio y al final de cada mes deja que elija un juguete de la lista. Esto enseñará al niño a pensar en sus compras y a no ceder al impulso de comprar algo llamativo y que normalmente no es lo más necesario.
Crea oportunidades para ganar dinero, pero no les pagues a los niños por sus calificaciones escolares
Empieza por preguntarle si quiere ganar su propio dinero y qué está dispuesto a hacer para conseguirlo. Puedes pagarle al niño una bonificación regular, aumentando gradualmente la cantidad en función de su edad en lugar de darle dinero por algo en particular. De este modo, podrá planificar sus gastos y pensar en las consecuencias. Si esta bonificación no es suficiente, siempre puedes acordar otra forma de que el niño gane dinero.
Formas de ganar dinero para los niños en edad de escuela primaria:
1. Hacer tarjetas navideñas o manualidades para vender
2. Elijan con el niño los juguetes innecesarios para venderlos
Para niños en edad de escuela secundaria:
1. Pasear a los perros de otras personas (si la raza lo permite y no hay alergias)
2. Lavar autos en un lavado
3. Reparación y reventa de artículos de segunda mano en internet
Lo importante es estar siempre atento a lo que hacen los niños para poder guiarlos, aconsejarlos o ayudarlos en su introducción al mundo de las finanzas.
¡Pero no les pagues a los niños por sus notas! Pagar por las notas escolares puede generar expectativas infladas: al pagar una vez, creas un precedente y el niño pensará que a partir de ahora todas las notas serán pagadas.
Elaboren un presupuesto
Un presupuesto es el plan financiero de una familia basado en sus ingresos y gastos. Al elaborarlo con nuestros hijos, los ayudamos a establecer metas realistas, vivir dentro de sus posibilidades y ser más responsables con las finanzas a cualquier edad.
A los niños más pequeños se les pueden explicar las diferentes partes del presupuesto, como los gastos del departamento, el auto, la ropa, las vacaciones, etc. A los niños mayores se les puede dar detalles del presupuesto familiar, explicándoles cómo priorizar los gastos y en qué se puede ahorrar.
Cuenta sobre los beneficios del ahorro
Sam Renick, coautor del proyecto Sammy Rabbit, dice: “Ahorrar enseña disciplina y cómo posponer la recompensa. Ahorrar enseña a establecer metas y planificar”. Es importante explicarles a los niños que el dinero no solo existe para gastarlo. Diles que ahorrar es un hábito bueno.
Por ejemplo, el niño se compra mucha ropa, pero se queja de que no puede permitirse unos tenis caros. Ayúdale a hacer un plan de ahorro durante unos meses para que pueda ver sus gastos y analizar sus errores. Muéstrale una forma concreta, por ejemplo teniendo dos sobres. En un sobre, pon el dinero para los pequeños gastos corrientes y en el otro sobre pon el dinero para los gastos mayores.
Cuando el niño tenga la edad suficiente, puedes contarle sobre las tarjetas de débito con control parental y de las cuentas bancarias de ahorro.