Por qué dormir mucho no es saludable
Muchos saben que la falta de sueño es perjudicial para muchos aspectos de la vida y es muy malo para la salud. Sin embargo, dormir demasiado no tiene consecuencias menos negativas.
En Ideas en 5 minutos explicaremos las consecuencias de dormir demasiado y contaremos qué hacer si uno queda con sueño a pesar de dormir 7-8 horas.
Riesgo de enfermedades cardíacas
Científicos británicos analizaron estudios que examinaron la relación entre la duración y la calidad del sueño y los riesgos de enfermedades cardiovasculares. Controlaron datos de 74 estudios, que involucraron a más de 3 millones de personas.
Como resultado, se descubrió que la duración del sueño de más de 8 horas se asocia con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, los riesgos crecían en función del aumento de la duración del sueño. También los investigadores concluyeron que, contrariamente a la creencia popular, dormir más de 7-8 horas es peor que dormir menos de 7 horas.
Aumento de peso
Hay muchos estudios que muestran que la falta de sueño puede provocar obesidad. Pero resulta que también existe algo en común entre el sueño prolongado y el aumento de peso.
Científicos estadounidenses analizaron los resultados de una encuesta nacional sobre el estado de salud en Estados Unidos. El estudio examinó datos de aproximadamente 56 mil personas de entre 18 y 85 años. Además del sueño, los científicos estudiaron datos sobre la región de nacimiento, los ingresos, los malos hábitos y muchos otros factores. Sin embargo, fueron los datos sobre la duración del sueño los que con mayor frecuencia lograban relacionarse directamente con la presencia de exceso de peso.
Bajo rendimiento
En un estudio de 2018, investigadores analizaron datos sobre la pérdida de productividad relacionada con el sueño. En esto participaron más de 1000 personas de 22 a 60 años. El rendimiento también se evaluó en relación con parámetros como la salud, la presencia de estrés, problemas en el trabajo, etc.
Analizando el tema de la duración del sueño, los científicos dividieron este criterio en varias categorías: muy corto (menos de 4 horas), corto (5 a 6 horas), normal (de 7 a 8 horas) y largo (9 horas y más).
Junto con una gran cantidad de conclusiones para cada parámetro evaluado, los científicos descubrieron que tanto la falta de sueño como su exceso afectan a la disminución de la productividad. Los investigadores concluyeron que el sueño prolongado reduce la productividad en un 24 %.
¿Qué hacer?
Si uno no logra recuperar sus fuerzas en 7-8 horas de sueño y pasa más tiempo durmiendo, entonces vale la pena considerar cómo cambiar el estilo de vida.
Hay muchas formas de poner en orden los hábitos relacionados con el sueño.
- Mantener horarios fijos. El hábito de dormirse y despertarse al mismo tiempo, incluso durante los fines de semana y feriados, puede ayudar a normalizar el sueño.
- Hacer ejercicio físico con regularidad no menos de 2 horas antes de dormir ayudará a conciliar el sueño con facilidad.
- Llevar una dieta saludable también tiene un efecto positivo en la higiene del sueño. No se debe comer mucho antes de ir a dormir, aunque un refrigerio saludable ayudará a dormirse más rápido y de forma más profunda.
- Limitar la cantidad de cafeína mejora el sueño. Su ingesta no debe superar las 2 porciones al día.
- El dormitorio es solo para dormir. Este cuarto no debe estar asociado con la actividad, por lo que los expertos en el sueño no recomiendan quedarse dormido con dispositivos a mano. Además, tampoco es bueno el hábito de ver televisión o comer en la cama. El dormitorio debe ser oscuro y silencioso y estar asociado solo con el sueño.