Con qué frecuencia se debe bañar a un recién nacido y cómo hacerlo correctamente
Las madres primerizas suelen tener dificultades para bañar a sus bebés recién nacidos. Después de todo, los consejos sobre la frecuencia con la que se debe bañar a los bebés y la forma de hacerlo correctamente varían.
Ideas en 5 minutos ha preparado una guía, respaldada por los consejos de los expertos, que responde a las preguntas básicas sobre el baño del bebé.
❗ Este artículo tiene carácter informativo y no puede sustituir las recomendaciones de los especialistas.
Cuándo se debe bañar al bebé por primera vez
Hasta hace poco, se creía que los bebés debían ser bañados en las primeras horas después del nacimiento. Pero con el tiempo la opinión de los médicos ha cambiado. La OMS recomienda posponer el primer baño hasta 24 horas después del nacimiento o esperar al menos 6 horas si no estás preparada para esperar más tiempo por alguna razón. Esto facilitará la transición del bebé de la vida en el útero al mundo “grande”.
El bebé viene al mundo cubierto de una sustancia cerosa llamada vérnix. Este recubrimiento es un humectante natural y tiene propiedades antibacterianas. Al posponer el primer baño, ayudarás a que la piel de tu bebé se mantenga suave y limpia durante más tiempo. Además, se puede evitar un descenso de la temperatura corporal del bebé y una disminución de los niveles de azúcar.
Con qué frecuencia hay que bañar al bebé
Probablemente hayas escuchado que los recién nacidos necesitan un baño diario. Sin embargo, los expertos dicen que no es así. Si te ocupas de la higiene de tu bebé durante el día (limpias y lavas bien la zona de los pañales y le lavas las manos y la cara), se puede bañar al bebé durante sus primeros meses de vida de 2 a 4 veces por semana.
Los bebés rara vez sudan y apenas se ensucian, por lo que no necesitan baños diarios. En cambio, demasiados baños pueden resecar su sensible piel.
Para mantener la piel de tu bebé limpia entre los baños, revisa los pliegues de su cuerpo: examina los muslos, las axilas, la zona de la ingle y debajo de la barbilla, y limpia estas zonas con un paño húmedo si es necesario.
Cómo bañar a un bebé cuyo cordón umbilical aún no se ha caído
Los pediatras recomiendan sustituir el baño por la limpieza con una esponja húmeda hasta que se caigan los restos del cordón umbilical. En promedio, esto puede tomar de 1 a 2 semanas.
Un baño de esponja es muy similar a un baño normal. Solo que con este baño no hay que sumergir al bebé en el agua. Para bañarlo, sigue unos sencillos pasos:
- Ubícate en una habitación cálida y sin corrientes de aire. Elige una superficie plana y bastante dura (un cambiador, una mesa de noche o una cama dura servirán) y cúbrela con una manta o una toalla suave.
- Vierte agua tibia en una palangana. Comprueba la temperatura con la mano o con un termómetro de agua para asegurarte de que no esté demasiado caliente.
- Prepara una esponja, una toalla, jabón para bebés sin perfume, un pañal limpio y ropa limpia.
- Desviste a tu bebé y envuélvelo con una toalla, luego acuéstalo boca arriba en el lugar preparado.
- Moja la esponja con agua tibia, exprime el exceso de líquido y limpia suavemente la cara de tu bebé.
- Bajando, limpia las partes del cuerpo una por una con la esponja. Presta especial atención a los pliegues bajo los brazos, detrás de las orejas, alrededor del cuello y en la zona del pañal. Lava los dedos de los pies y de las manos de tu bebé.
- Si usas jabón, asegúrate de que sea suave y humectante. En este caso, recuerda enjuagarlo bien con agua.
- Cuando hayas terminado de bañar a tu bebé, sécalo bien, ponle un pañal nuevo y ropa limpia.
❗ Recuerda que debes sostener a tu bebé en todo momento durante el baño, y no lo dejes desatendido.
Cómo bañar a un bebé después
Una vez que la zona umbilical esté completamente curada, puedes bañar a tu bebé en agua.
Puede que al principio no le guste el agua, así que intenta que el baño sea corto y lo más cómodo posible para él. No bañes a tu bebé justo después de alimentarlo, cuando tenga hambre o esté cansado.
Realiza los siguientes pasos:
- Antes del procedimiento, reúne todo lo necesario: una tina para bebés, dos toallas, un pañal limpio, ropa e hisopos de algodón.
- Vierte una pequeña cantidad de agua en la tina, revuélvela y comprueba la temperatura. Ten en cuenta que el agua debe estar tibia, no caliente.
- Procura no añadir ningún jabón al baño al principio y baña a tu bebé solo con agua tibia.
- Antes de sumergir al bebé en el agua, acuéstalo en tu regazo y limpia su cara con almohadillas de algodón ligeramente mojadas en agua.
- Sosteniendo al bebé sobre la tina, masajea y enjuaga suavemente su cabeza y luego sécala con una toalla.
- Una vez lavada la parte superior del cuerpo del bebé, retira el pañal y limpia la suciedad con un paño húmedo.
- Cuando hayas completado todos los pasos anteriores, sumerge el cuerpo de tu bebé en la tina. Asegúrate de sostener su cabeza y sus hombros para que la parte superior de su cuerpo no toque el agua.
- Con la mano libre, vierte suavemente agua sobre el cuerpo del bebé, masajeando cuidadosamente la piel.
- Saca al bebé del agua con cuidado, sécalo con una toalla y ponle un pañal y ropa limpia.
❗ No dejes a tu bebé solo en la tina. Si tienes que irte, lleva a tu bebé contigo.
Respuestas a las preguntas más frecuentes
- ¿Por qué el bebé llora siempre cuando intento bañarlo?
El bebé puede estar molesto si tiene hambre o tiene miedo de quedarse solo en el agua. También es posible que al bebé no le guste la temperatura del agua, que puede estar demasiado caliente o demasiado fría para su cuerpo. - ¿Se debe utilizar una crema hidratante después de cada baño?
Los pediatras dicen que los aceites y polvos no son necesarios después del baño, ya que la piel del bebé está bien hidratada por naturaleza. En algunos casos, los productos adicionales pueden hacer más daño que bien. Por ejemplo, pueden acumularse en los pliegues y causar irritación y erupciones. - ¿Es necesario lavar la cabeza del bebé?
Si el recién nacido tiene pelo y crees que necesita un lavado, puedes utilizar un champú suave para bebés. Si lo haces, aplica masajeando una gota del producto en la cabeza de tu bebé. A continuación, enjuaga la espuma vertiendo suavemente agua sobre su cabeza. Ten cuidado de que la espuma y el líquido no le entren en los ojos. - ¿Cuánta agua debo poner en la tina?
El agua del baño no debe ser demasiada. Los pediatras recomiendan verter solo unos 5 cm de agua en la tina. - ¿Cuál es la temperatura que debe tener el agua?
El agua tibia está bien para un baño. A algunos bebés les gusta el agua más fría, a otros el agua más caliente, pero los expertos recomiendan mantener la temperatura en torno a los 38 grados.