Cómo cortar una cebolla y no llorar en el intento
Lágrimas al momento de pelar y cortar una cebolla es una historia familiar para cualquier persona que haya tenido que enfrentarse a este vegetal.
Con Ideas en 5 minutos, conocerás por qué una cebolla te hace llorar y qué se puede hacer para evitar todas esas lágrimas.
Por qué una cebolla nos hace llorar
El aroma y sabor característico de una cebolla es otorgado por los aceites esenciales en su composición, los cuales contienen moléculas orgánicas, sulfóxidos de aminoácidos. Al pelar, cortar o triturar una cebolla, causamos un daño en las células microscópicas llenas de una enzima llamada alinasa. Al interactuar con las enzimas, los sulfóxidos de aminoácidos se convierten en sustancias volátiles y cáusticas.
Ellas actúan de forma similar a los compuestos químicos utilizados en los gases lacrimógenos y comienzan a irritar los ojos. En cuanto el vapor alcanza las glándulas lagrimales, comienzan a producir lágrimas para lavar el irritante de los ojos.
La formación de la sustancia volátil al cortar (pelar) la cebolla alcanza su punto máximo después de 30 segundos y se completa aproximadamente después de 5 minutos.
Cómo cortar una cebolla y no llorar
- Utiliza un cuchillo afilado para cortar una cebolla. Un cuchillo sin filo deja en la cebolla una marca más burda, dañando las paredes celulares de las membranas de la cebolla. Esto provoca que se libere una mayor cantidad del gas que causa la sensación de ardor en los ojos.
- Corta las cebollas encendiendo la campana de cocina. Ayudará a reducir la cantidad de partículas irritantes que estarán volando en al aire.
- Si tienes mala vista, ponte unos lentes de contacto en lugar de lentes normales. Servirán como una barrera protectora, impidiendo que el compuesto químico, que se libera al cortar la cebolla, entre en contacto con la superficie de tus ojos. También se pueden utilizar unos lentes de cocina especiales.
- Intenta enfriar la cebolla. Enfriar las mitades de cebolla peladas en el refrigerador o en un recipiente con agua fría durante media hora puede reducir la liberación de la sustancia química y volverla menos volátil.
- Al cortar una cebolla, corta la raíz al último. En ella se encuentra una mayor concentración de las enzimas lacrimógenas.